Esta semana Darío nos ha traído a clase (a petición mía) los renacuajos que tiene. En primer lugar le pregunté cómo y dónde los habían "pescado", con quién iba, si sabían lo que comían, etc.
Después saqué el renacuajo más pequeñito (echándolo en un bote transparente con un poquito de agua) y Darío se lo enseñó al resto de compañeros, a continuación hicimos lo mismo con un renacuajo más grande, con otro que ya tenía patas pero la cola aún larga y por último con el que era ya casi una rana aunque aún tenía una pequeña cola. Para finalizar cogí la ranita y les encantó verla saltar de nuevo al cubo.
Esta experiencia me sirvió para hablarles de la metamorfosis y resultó genial porque ellos mismos se acordaron de otros "animalitos" que tenemos en clase y me dijeron: "seño, ¡como los gusanos de seda que se convierten en mariposas!".
Como final de la actividad escribimos y dibujamos la METAMORFOSIS. ¡Si es que son geniales!
Muy interesante esta entrada para variar la metaforfosis que siempre se la asociamos a los gusanos de seda ---(que no son gusanos, sino orugas)---. Es importante que los niños y niñas experimenten con la realidad lo más posible.
ResponderEliminarEnhorabuena por tu labor, y gracias por compartila.
Saludos. Rafa.
Por cierto, no encuentro lo del mensaje del premio que me habías dejado. Aunque tampoco tengo demasiado tiempo para ir repartiendo luego y estoy últimamente dejando un poco de lado esas tareas. Ah!! tampoco te veo de seguidora de mi blog!!!???
ResponderEliminarSaludos. Rafa