Yo fui acompañando concretamente al alumnado de 3 años A.
Estuvimos en un taller en el que, entre otras cosas, colaboramos en preparar un "suculento" desayuno a base de frutas para dar de comer a los animales posteriormente. Para ello, lo que hicimos fue introducir la fruta en una calabaza y que así tuvieran que buscarla mediante el olor. Hubo uno que inclusive parecía jugar a la pelota con ella, y mientras la rodaba los trozos de fruta salían por la cara de la calabaza y se los comía.
Fue un día muy divertido.
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